El gobierno cubano podría haber traslado a Rusia a más de 14 mil militares en los meses de julio y agosto, de acuerdo con análisis posteriores a que la isla revelara la existencia de una red que reclutaba mercenarios cubanos para combatir junto a Moscú en la invasión de Ucrania.
Citado por Infobae, el análisis de The Havana Consulting Group y Cuba Siglo 21 asegura que desde el 1 de julio, se han registrado 13 vuelos semanales desde Rusia hacia tres destinos en Cuba: Varadero (8 vuelos), Cayo Coco (3 vuelos) y La Habana (2 vuelos). Estos viajes fueron operados por aeronaves Boeing 777 y Boeing 787, lo que suma una capacidad total semanal de 5833 plazas.
La nota del medio argentino considera que, durante el período de julio a agosto, se llevaron a cabo un total de 117 vuelos desde Rusia a Cuba, lo que representó una capacidad de asientos disponibles de 52.497.
En estos dos meses viajaron un total de 38 407 turistas rusos a la isla, los que solo utilizaron el 73,16 por ciento de la capacidad de asientos disponibles y dejando libres el 26,84 por ciento restante.
De acuerdo con los análisis citados, la cantidad de asientos no utilizados podría haber proporcionado al gobierno la capacidad operativa para trasladar a territorio ruso a unos 14 mil individuos, presuntamente militares, durante el mencionado período.
Desde La Habana, la Cancillería informó que se desarticuló una red de tráfico de personas que opera desde Rusia para incorporar a ciudadanos cubanos a las fuerzas militares que luchan en la guerra en Ucrania.
Según un reporte de la televisión cubana de este jueves, especialistas de la Dirección General de Investigación Criminal del Ministerio del Interior informaron que se encuentran detenidas 17 personas relacionadas con esta red de reclutamiento de personas en Cuba.
El coronel César Rodríguez, de la Dirección General de Investigación Criminal del Ministerio del Interior, informó que los reclutadores buscaban perfiles de personas con antecedentes penales.
Tres de estas personas “pertenecían al esquema de reclutamiento dentro de la isla”, en lo que otros 14 han confesado “haberse incorporado por decisión individual y voluntaria a la operación, a cambio de la residencia en el país euroasiático y una sustancial retribución monetaria”.
De acuerdo con Cubadebate, el nuevo código penal establece “sanciones severas para este tipo de delitos” que encaja entre la trata, el tráfico de personas y el mercenarismo.
