El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó hoy la invitación a su homólogo de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, a la ceremonia por el 200 aniversario de la independencia nacional.
A una pregunta al respecto en su conferencia de prensa matutina en el Palacio Nacional, el mandatario dijo que el presidente de Cuba será el invitado ese día 16, y el 27 de este mismo mes el de Estados Unidos, Joe Biden, por la consumación de la independencia en esa fecha, pero de 1821.
Aclaró que Biden ya notificó la imposibilidad de asistir, y en su representación lo hará el secretario del Departamento de Estado, Anthony Blinken.
Explicó que todo este año es de conmemoraciones patrias porque están recordando los 700 años de fundación del México Tenochtitlan, también se conmemoran los 500 años de su caída por la invasión española, y los 200 años de nuestra independencia con el Grito de Dolores del cura Miguel Hidalgo el 15/16 de septiembre de 1810.
Anunció que el gobernante cubano pronunciará un discurso al igual que hicieron los demás invitados anteriores, y en especial porque México tiene una relación de amistad con el gobierno de Cuba desde hace mucho tiempo.
Desde luego, la llegada de Díaz-Canel a México tiene detractores, incluso dentro de México, como el expresidente Felipe Calderón, cuyas críticas fueron respondidas por Obrador esta mañana.
Calderón había descrito como «inaceptable el protagonismo en las fiestas del bicentenario de la consumación de la independencia de un dictador que encierra a decenas de ciudadanos cubanos», en referencia al gobernante caribeño.
«Qué bien que no le guste. Fuera máscaras, porque él se entrevistó con Raúl Castro, nada más que son muy hipócritas, señaló el presidente mexicano», dijo esta mañana López Obrador en respuesta al disgusto de Calderón.
Felipe Calderón visitó Cuba de manera oficial en abril de 2012, y fue recibido en el Palacio de la Revolución por el entonces presidente Raúl Castro.
