Autoridades gubernamentales en Cuba, informaron sobre el complejo escenario epidemiológico que vuelve a enfrentar La Habana. Los reportes de los últimos días revelan que nuevamente desafían un aumento acelerado del número de contagios por la COVID-19.
Con 43 brotes activos y más de 21 mil personas ingresadas, entre ellas las recluidas en sus casas con confirmación de contagio, se pudo determinar que el 72% de los nuevos contagios ya habían recibido las tres dosis de los candidatos vacunales cubanos y casi la mitad de ellos (42%) cumplieron el ciclo total de inmunización posterior a la última inyección.
Ileana Morales, directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), señaló que en estos momentos circulan en la capital 16 variantes del coronavirus, con predominio de la cepa Delta.
«El 60% de las cepas que están circulando en La Habana es [de la variante] Delta y no tenemos que decirles que esto cambia totalmente la dinámica de la propagación del virus», dijo Morales durante una reunión ampliada del Grupo Temporal de Trabajo (GTT) para la prevención y control de la epidemia en La Habana, dada a conocer en un reporte del Noticiero Nacional de Televisión.
La campaña de vacunación por parte de MINSAP, en la Habana abarcó 1.3 millones mayores de 19 años y concluyó la semana pasada, lo que ha evitado un mayor incremento de infectados, graves y fallecidos, aunque, todavía no es suficiente para detener la propagación que golpea a la capital, donde la variante Delta está extendida en sus 15 municipios, expuso la experta.
Morales advirtió que el predominio de la cepa Delta, con una carga viral 1,200 veces superior a las variantes originales, deberá incidir en un incremento de los pacientes ingresados en salas hospitalarias en los próximos días.
Por su parte el Primer Ministro de Cuba, Manuel Marrero Cruz, quien encabezó el encuentro, hizo una evaluación del complejo panorama virológico de La Habana, y destacó que el territorio capitalino se encuentra en una etapa superior del enfrentamiento al COVID-19 ante lo cual deben aplicarse con rigor las medidas establecidas, aunque reconoció que en la capital es inviable aplicar «un grupo de disposiciones que se ejecutaron en otras provincias y dieron resultados».
Marrero alertó sobre la alta vulnerabilidad de los 700,000 habaneros que no se han podido vacunar, de ellos 400,000 menores de 19 años y 300,000 adultos con diferentes «criterios de exclusión».
«Yo hacía una reflexión en la reunión pasada y todo esto puede ser porque están confiados, y entonces me cuido menos y me infecto más. No me pasa nada, pero me lo llevo para la casa donde están mis hijos sin vacunar, esto es un gran problema», expresó el dirigente.
En la isla se implementó una campaña de inmunización con la vacuna Abdala aprobada por los científicos del país y los candidatos vacunales Soberana 02 y Soberana Plus, que según estudios nacionales dan como altos los índices de efectividad. Las dosis se han aplicado completamente en 20 municipios del país, sumados a los 15 capitalinos, cuatro de la provincia de Santiago de Cuba e Isla de la Juventud.
Actualmente el proceso avanza en otros 35 municipios de las restantes 14 provincias, con prioridad en grupos de riesgo como embarazadas, personas con enfermedades crónicas y convalecientes de la enfermedad.
La crisis sanitaria ha provocado caos en centros de atención primaria y los hospitales en todo el país, y las quejas de la población a través de las redes sociales cada vez son más numerosas, mientras los pronósticos del doctor en Ciencias Raúl Guinovart, decano de la Facultad de Matemática y Computación, auguran un incremento de casos confirmados en la segunda mitad de agosto.
Una crítica situación de contagios y hospitalizaciones enfrentan también las provincias de Ciego de Ávila, Holguín y Guantánamo. Durante los últimos 15 días entre los tres territorios suman 30,600 casos positivos a la enfermedad.
