Por primera vez en la historia Isla de la Juventud defenderá los colores de su camiseta en una final del Clásico Nacional de Béisbol cubano, acontecimiento que celebran con euforia los parciales de Los Piratas. Tras el atronador triunfo de los pupilos de José Luis Rodríguez en el palacio de Los Cocodrilos, la afición del municipio especial tomó las calles esta madrugada para celebrar a ritmo de conga una victoria que a ojos de muchos expertos parecía quimérica.
La escuadra, representante de un poco más de 84 mil habitantes, demostró en las últimas subseries que puede sacar el extra de los campeones, cuando se impuso en buena lid, primero frente a Industriales en la clasificatoria y 4-2 en el play off contra Matanzas y ofrecer espectáculos de gran intensidad aún en el terreno de sus contendientes. Luego de 16 años de ubicarse en la tercera posición en la edición 38 de la Serie Nacional de Béisbol (1999), está inclusión de Los Piratas en la discusión por el título hace soñar a sus seguidores con la posibilidad de la corona.
A pesar de los pronósticos, los locales demostraron en el diamante que no son rivales pequeños, ni llegaron a la posición actual por ventura, este resultado lo respalda su participación en nueve ocasiones en los juegos de postemporada.
El conjunto de Isla de la Juventud, a propósito de su excelente actuación, dedica este triunfo al pueblo que se alista para celebrar la victoria que hace 60 años logró la excarcelación de Fidel y el resto de los sobrevivientes de la gesta del Moncada del mal llamado Presidio Modelo, el 15 de mayo de 1955.